La Dra Karin Staab nos habla del PRP, que es uno de los tratamientos de Medicina Biológica Regenerativa que más se realiza en la actualidad. Consiste en introducir en la piel Factores de Crecimiento que están contenidos en la plaquetas que circulan en la sangre.
El preparado de “plasma rico en plaquetas” es uno de los tratamientos de belleza y rejuvenecimiento que han surgido con técnicas mínimamente invasivas. Es un procedimiento bastante simple ya que es muy bien tolerado y no requiere de reposo. Básicamente se toma una pequeña cantidad de sangre de la propia persona para realizar un concentrado de plaquetas. Las plaquetas así obtenidas se activan e inyectan en la piel del paciente utilizando agujas muy finas. Las plaquetas inmediatamente sueltan los factores de crecimiento que contienen; éstas biomoléculas obligarán a las células del dermis a trabajar de manera más activa, juvenil y eficiente, estimulando incluso a las células de reserva del dermis que son las Células Madre.
Uno de los efectos más visibles es la regeneración de los tejidos con lo cual se consigue un rejuvenecimiento desde adentro hacia afuera logrando así recuperar el esplendor cutáneo. Estimula las células de la epidermis y dermis a nivel genético, mejora la estructura misma del dermis con lo que se consigue reafirmar los tejidos flácidos, mejora la configuración y composición de las macromoléculas como el colágeno y la elastina, además de aumentar mucho la producción de ácido hialurónico que es la base de la matriz dérmica y responsable del contenido de agua de la misma. En fin, reactiva la piel y la rejuvenece desde su composición más íntima y a nivel nuclear.
El preparado de plaquetas concentradas se consigue centrifugando la sangre para separar las plaquetas, las cuales se van a reinsertar por medio de intradermoterapia. El plasma rico en plaquetas libera una buena cantidad de factores de crecimiento los cuales actúan regenerando y reorganizando todo tipo de tejidos dañados actuando en cada célula (fibroblastos y células madre del dermis) y en su respectiva matriz celular. Es por ello que se está utilizando este procedimiento como un método natural y excelente para rejuvenecer y renovar la piel, y por supuesto sin reacciones adversas.
La aplicación del concentrado de plaquetas además es muy útil en los siguientes casos:
- Cicatrización de heridas y tejido óseo.
- Sello en heridas.
- Aceleración en la asimilación de injertos.
- Para detener el sangrado.
- En casos de implantes para regeneración, cicatrización y asimilación.
- En personas con déficit en el proceso de cicatrización como diabéticos.
- Regeneración de la piel ulcerada o con escaras.
Recomendaciones y contraindicaciones:
La persona no debe consumir medicamentos antiplaquetarios, aspirina o analgésicos.
En sí este tratamiento actúa deteniendo el deterioro de los tejidos y de la piel, causado por el paso del tiempo. Puntos a favor, uno de los principales es que el rejuvenecimiento es profundo y duradero, actuando desde las células, lo cual se refleja en el exterior.
¿Qué resultados se obtienen y cuándo?
Con este tratamiento se obtiene mayor luminosidad y mejora del color de la piel; disminución de las arrugas finas y de las líneas de expresión, notable incremento de la tersura de la piel y retracción en las zonas que presentan chalazis o flacidez (caída) por efecto de la gravedad.
La mejoría es apreciable desde los primeros días y es máxima a los 20 ó 30 días, manteniéndose estable por muchos meses más.
Pre y Post tratamiento
El tratamiento se realiza de forma ambulatoria y no presenta contraindicaciones. El mismo es apto para hombres y mujeres, no requiere ningún tipo de preparación previa y tras su aplicación, las personas se reincorporan de forma inmediata a su vida social, sin una sola cicatriz, marca o enrrojecimiento.