Puntos Rubí. Son Angiomas Puntiformes. Les dicen “cabecitas de vena” o “angiomas seniles” y, a veces, sangran. Son angiomas o hemangiomas.
Son dilataciones normales de vénulas cutáneas y forman parte de los cambios que experimenta la piel con el paso del tiempo. No tienen significado patológico alguno y son absolutamente benignos que sólo suponen un problema estético o cuando son muy grandes, que pueden sangrar con el roce de la ropa o las manos.
¿Cómo se ven?
Aparecen después de los 30 años y se ven como manchas o pequeñas pápulas rojo brillante o violeta obscuro. Pueden cambiar su color a negro y doler si se trombosan o sangrar y picar si están en una zona de roce.
¿Por qué motivo aparecen los puntos rubí?
La Dra Karin Staab nos aclara que no hay motivo alguno en concreto que induzca su aparición, aunque es posible que exista una predisposición genética. Son parte del proceso normal de envejecimiento de la piel.
¿Cómo se diagnostican?
El médico entrenado puede hacer el diagnóstico sin ayuda de aparatología alguna con la simple observación de las lesiones. En casoso de duda, piede hacerse una biopsia.
¿Pueden transformarse en Cáncer de piel?
No. Son lesiones benignas que no suponen ningún riesgo para la salud.
¿Son contagiosos?
No. Los puntos rubí son simples dilataciones de los vasso superficiales del dermis, no son productos de infección alguna, ni se contagian.
¿Son muy frecuentes?
Prácticamente todas las personas tienen puntos rubí. Se sitúan principalmente en el tronco, aunque también aparecen el las extremidades o la cabeza. Son más frecuentes a mayor edad y tienen la misma incidencia entre hombres y mujeres.
¿Es necesario su tratamiento?
No es estrictamente necesario eliminar los puntos rubí, ya que es un tema eminentemente estético y no conducen a enfermedades. Se pueden eliminar cuando se ven feos, porque sangran o duelen con el roce de la ropa.
¿Cómo se tratan?
Existen varios métodos:
- Electrocoagulación. Tiene la desventaja de requerir anestesia y capacidad de dejar cicatrices feas.
- Crioterapia con Nitrógeno líquido. Puede dejar cicatrices.
Tratamiento Láser. Es el método actualmente recomendado más cómodo y rápido para el tratamiento definitivo de los puntos rubí. Como impacta de manera específica la hemoglobina dentro del vaso sanguíneo dilatado, se elimina el punto rubí sin daño en el tejido circundante, quedando la piel sin cicatriz. Requiere 1 ó 2 sesiones, según el tamaño y su profundidad. La Dra Staab sugiere éste método, sobre todo en puntos rubí ubicados en piel sensible o muy visible, como es el rotro.