La Doctora Karin Staab explica que la PEFE (Paniculopatía Esclero-Fibro-Edematosa; conocida como Celulitis) es un condición de la mujer debido a la conformación histológica del tejido celular subcutáneo, que es el sostén de la piel. En él se acumula grasa desde la adolescencia obteniendo la silueta femenina tan clásica. Éste puede ser la «maldición» en las mujeres adultas de toda edad, peso y conformación física.
Cuando las temperaturas más agradables se dejan sentir en la zona y vemos como abrigos y chalecos van quedando de lado para dar paso a ropa más liviana, las que dejan entrever con cierta audacia nuestro cuerpo. Pero lo que para muchas mujeres resulta algo atractivo para otras no lo es, pues deben luchar con un mal silencioso y que muchas veces es causa de una gran preocupación: la temida celulitis (piel de naranja), producida por razones congénitas, alteraciones vasculares y la producción de toxinas.
El tratamiento de ésta condición es posible utilizando diversos medicamentos y técnicas para lograr una mejoría en la nutrición de los tegumentos, flexibilidad de los septos interlobulares, disminución de la presión que ejerce esa grasa sobre los vasos sanguíneos y linfáticos, drenaje linfático, tensar la piel cuando hay flacidez asociada y mejorar el tono muscular que es quien sostiene los septos. Este tratamiento por supuesto debe ser hecho por un médico especialista, ya que los medicamentos que se requieren deben ser depositados en el tejido celular subcutáneo mismo (la piel es impermeable) y las técnicas de terapia subdérmica no invasiva, ultrasonido, drenaje linfático o electroestimulación, deben ser utilizadas con conocimientos vastos de la enfermedad.